El pasado miércoles, malvivientes ingresaron a la casa del abuelito en el barrio Cerro de dicha localidad, y robaron la bicicleta que se encontraba guardada en el corredor. Don Pastor lamentó profundamente la pérdida de su gran compañera de viajes con la que compartió inolvidables momentos.  “Sobre esa bici nos llevaba todos los días a la escuela, fue su medio de transporte en tiempos de crisis y ahora, a su edad, la fuerza de sus piernas”, comentó angustiada Ana Liz, una de sus hijas.

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El abuelito tenía un profundo cariño por su bicicleta, es por eso que sus familiares denunciaron el hecho en la comisaría local y ofrecen una recompensa para poder recuperar el objeto robado. Por supuesto, las muestras de afecto no se hicieron esperar y aunque gente de la zona quiso regalarle una nueva bici, don Pastor prefiere esperar, ya que no pierde las esperanzas de recuperar a su fiel compañera. “No pierdo las esperanzas de recuperarla para volver a sonreír”, dijo don Pastor. ¿Qué pensás sobre esta noticia?

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