Víctor Allende tiene 19 años y hace pocas semanas fue padre por primera vez. Pero su felicidad se vio opacada cuando tuvo que renunciar a su puesto de trabajo debido a las malas condiciones económicas: “Me prometieron que iban a ser tres meses de prueba, ganaba G. 60.000 por día. Si tenía libre, no me pagaban ese jornal. Cumplí tres meses y me dijeron que me iban a pagar G. 1.800.000 solamente. Eso no es sueldo mínimo. Aguanté porque me habían prometido sueldo mínimo (2.041.123)”, lamentó el muchacho.

Via facebook.com

Desesperado y con un bebé que mantener, Víctor no tuvo mejor idea que recurrir a la gente de buen corazón a través de Facebook: “Buenas. Estoy buscando trabajo en el rubro de ayudante en colocación de vidrios en general, ayudante de albañil, mozo y cajero, atención al cliente, tengo registro para moto, jardinería en general. Aprendo muy rápido y soy muy bueno con los números, por ahí si saben de algún trabajo”, escribió en la red social.

Via facebook.com

Increíblemente, al poco tiempo unas 30 personas se comunicaron con él para ofrecerle diferentes puestos de trabajo con un sueldo digno, algo que llenó su corazón de alegría. “Me puse feliz al ver que muchas personas me ofrecían trabajo. Eso quiere decir que aún confían en los jóvenes, que a veces somos tildados de irresponsables”, dijo Allende.

Ahora, el muchacho es el nuevo empleado de una cerrajería ubicada en el microcentro de Asunción: “Me dijeron que me presente, que iba a ser incorporación inmediata. Sueldo mínimo, IPS y comisiones. Lastimosamente no me fui a muchos lugares porque no tenía plata. Presté dinero para hacer mi currículum”, comentó. ¿Qué te parece esta emotiva historia?