Nelson Vidal Ruiz Villalba es un joven instructor de taekwondo que vive en la bella ciudad de Ybycuí. Como creció en el seno de una familia humilde, conoce muy bien la necesidades de su comunidad y sobre todo de los más jóvenes. Es por es que el profe -que enseña en la Academia de TKD Ybycuí- no pensó dos veces cuando un muchacho llamado Andrés Centurión Rotela, le dijo que quería aprender el arte marcial pero no tenía dinero para pagar las cuotas. “Este muchacho me preguntó si podía irse a trabajar conmigo a mi huerta para pagar de esa manera sus cuotas y le dije que sí sin pensarlo mucho, porque yo sé lo que es no tener un guaraní en el bolsillo. Ahora se va dos veces por semana para ayudarme con mis verduras”, comentó.

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Durante sus comienzos, Nelson también tuvo que hacer muchos sacrificios por el amor al taekwondo, ya que debía recorrer 10 kilómetros desde su casa en la compañía Entre Ríos hasta el casco urbano. “Me iba y venía en bicicleta para practicar. Hendy. Ya desde chico empecé a vender huevos caseros, queso que hacía mamá y verduras para pagar mis cuotas. Una vez tenía que dar un examen y no tenía la plata, entonces le pregunté a mi profesor si le podía pagar con huevos y queso y me aceptó sin problemas. Es por eso que yo le ayudo a mis alumnos porque yo pasé por lo mismo”, recordó el marcialista.

El profe nunca dejó de estudiar ni capacitarse, y gracias a su humilde trabajo en la huerta sigue adelante hasta el día de hoy. “Gracias a la chacra pude pagar todos mis estudios, la escuela, la secundaria y la universitaria, ahora acabo de terminar la carrera de Nutrición y ya presenté mi tesis y todo fue pagado por las ventas que salió de la huerta”, comentó muy orgulloso.

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No hay dudas de que el profe Nelson tiene un corazón solidario; es por eso que también ayuda a otros alumnos de escasos recursos para que puedan pagar sus cuotas. “Yo les ayudo a los otros jóvenes para realizar polladas, tallarinadas y otras actividades para juntar dinero para los gastos de cuotas y los exámenes, ápe ijetu’u hína si no te movés. Y esta es la mejor manera de llevarles por buen camino y evitar que caigan en cosas malas”, remarcó. ¿Qué opinás de este ejemplar profesor de artes marciales?